Habíamos terminado agotados lo de la pandemia, cuando así; sin aviso y sin protesto la Comunidad de Bejuma fue sorprendida por la aparición de una nueva calamidad. Unas llagas dolorosas y que crecen en forma irregular, que no responden a los antibióticos convencionales.
Unos le dicen vulgarmente » mordía de burro» no obstante su nombre es leishmaniasis. A la emisora empezaron a llegar mensajes de alerta de los sectores rurales y de comunidades como Canoabo, agua clara, Camino verde .Averiguamos y se confirmó de la incidencia y el tratamiento que deben cumplir los afectados, en Valencia y Nirgua.
Por ser la salud tema de gran interés para esta pagina y medio de comunicación,donde mas que música tenemos contenido, consultamos con el especialista Yusnady Gasca quien orientó las lineas gruesas de este articulo y accedió a realizar un programa de radio con su definición, características, tipo de conducta a seguir, prevención y los exámenes complementarios para dar con esta sintomatología.
Esperamos que este articulo sirve de orientación y en nada sustituye la consulta medica sobre esta enfermedad endémica de estas zonas altas de Carabobo, Yaracuy y los estados andinos de Venezuela.
Definición
La leishmaniasis es una enfermedad infecciosa no contagiosa causada por un parásito Protozoario del género Leishmania y transmitida por un véctor, un mosquito, un zancudo, flebotomo del género Lutzomia. La leishmaniasis Tegumentaria Americana es una enfermedad antigua, descrita a principios de 1.903 por el Doctor William Boog Leishman en Londres; en Venezuela en 1.917 Juan Iturbe y Eudoro González descrbieron clinicamente el primer caso de Leishmaniasis Cutánea.
El primer caso de Leishamaniasis Visceral en Venezuela se diagnóstico en 1.941 de un caso procedente del estado Cojedes. Fue en 1.974 cuando los doctores Jacinto Convit y María Pinardi plantearon la existencia en Venezuela de un espectro clínico con dos formas polares de Leishmaniasis, una forma a la que denominaron benigna que ellos determinaron Leishmaniasis Cutánea Localizada y una forma de Lesihmaniasis Cutánea diseminada o difusa a la que le denominaron la forma maligna.
A nivel Mundial esta enfermedad es endémica en 98 países presentandose casos en el Continente Americano, zona del Mediterráneo, Asia Central y el Medio Oriente, en donde se estima que la incidencia anual es de 0,7 a 1,2 millones de casos.
Es la Leishmaniasis una enfermedad considerada por la Organización Mundial de la Salud como desantendida puesto que afecta principalmente a las poblaciones más pobres, residentes de zonas rurales, residentes de áreas boscosas y se considera que hay 350 millones de personas en riesgo de contraer la infección y que cada año se producen dos millones de casos nuevos.
En Venezuela, según el Archivo del Registro Nacional de Casos de Leishmaniasis Cutánea del Servicio Autonómo del Instituto de Biomedicina que lleva el nombre del Doctor Jacinto Convit, desde 1.958 hasta el 2.018 se han registrado un total de 87.767.000 casos en 23 de los 24 Estados del País.
En Venezuela también esta enfermedad tiene tres formas clínicas fundamentales: La Leishmaniasis Cutánea Localizada que es la forma clínica más frecuente y representa el 98% de los casos seguidos por la Leishmaniasis MucoCutánea con el 1% de los casos y la Leishmaniasis Diseminada con el 0,1% de los casos.
Las formas cutáneas de la enfermedad pueden afectar a ambas sexos con mayor predominio en el sexo masculino y predominando en el grupo etario de 15 a 24 años de edad por ser estas personas comprendida entre estos años los pacientes que tiene características más especifícas de acuerdo a la actividad que desempeñan y lo hacen más vulnerables a las picaduras de los insectos.
Hay un predominio de la enfermedad en personas que laboran en actividades agrícolas y aquellas que residen en áreas endémicas, sobre todo áreas boscosas o en aquellas que tienen ocupaciones que de manera esporádica o permanente tienen una estrecha rtelación con las áreas boscosas endémicas que las hacen más susceptibles a contraer la enfermedad.
Tranmisión
El ciclo de vida del parásito Leishmania presenta dos formas; la forma promastigote, flagelada, extracelular, que se desarrolla en el vector, en el tracto digestivo del vector, específicamente y la forma amastigote, sin flagelo, es la forma intracelular obligada y que se desarrolla ya en el operador vertebrado infectado.
La cadena de transmisión de la enfermedad es la siguiente: el vector o mosquito del género Lutzomia pica a un hospedero infectado y el parásito se multiplica en el tracto digestivo del mismo, luego este mosquito o zancudo infectado pica al operador vertebrado infectandolo también.
La leishmaniasis por ser también una zoonosis, tiene reservorios o animales que constituyen reservorios, como por ejemplo los roedores, los marsupiales, los zorros, los chacales y los perros, siendo el perro el foco depositario principal en los casos de Leishmaniasis Visceral.
El período de incubación es díficil de determinar debido a la imposibilidad muchas veces de establecer con exactitud la fecha de la picadura del vector. Algunos autores señalan que varía de dos semanas a ocho meses y como promedio el período de incubación es de dos a tres meses.
Existen más de 100 especies de los mosquitos o zancudos del género Lutzomia, que también se le conocen con otros nombre en dependencia del país y la zona donde se diagnostique el caso, se le conocen a estas especies de zancudos con los nombre de Jejen, tarrayita, angoleta, fuifui.
Síntomas
La Leishmaniasis tiene tres formas clínicas fundamentales:
- Leishmaniasis Cutánea Localizada: también conocida como «Botón de Oriente», de una a cuatro semanas de la inoculación aparece una lesión cutánea bien demarcada, en el punto de la picadura del vector que inicialmente es como una papula, una lesión indurada, elevada, que aumenta de tamaño y que al final se ulcera en el centro. Estas lesiones pueden ser únicas o múltiples y pueden estar en cualquier localización anatómica, pero predominan en aquellas áreas expuestas a las picaduras del vector. Estas úlceras sino se complican con una infección secundaria son úlceras de crecimiento lento, por lo general de forma redondeada, los bordes son regulares y eritemato infiltrado, osea son bordes enrojecidos y elevados y el fondo de la lesión de la úlcera suele ser granulomatoso y con una escasa secreción serosa y por lo general indoloras; cuando estas lesiones son dolorosashay que sospechar una infección bacteriana asociada. Otra característica es que la piel perilesional es una piel completamente normal.
- Leishmaniasis Intermedia Cutánea: se caracteriza por presentar lesiones ulceradas que pueden ser únicas o múltiples, con la característica distintiva de tener un fondo de aspecto verrugoso.
- Leishmaniasis Mucocutánea: se caracteriza por presentar lesiones infiltrativas de aspecto granulomatoso principalmente en la mucosa nasal y también pueden extenderse a la mucosa de la faringe y de la laringe; con mucha frecuencia se acompañan de infecciones bacterianas secundarias y también con historias de sangrado.
- Leishmaniasis Visceral: también conocida como Enfermedad Kala-Azar, Fiebre Negra o Fiebre DumDum, donde un alto porcentaje de los individuos infectados por Leishmania que habitan en las áreas endémicas pueden presentar la enfermedad de manera subclínica o asintomática, esto esta dado por el aumento transitorio de anticuerpos antileshmania sin las manifestaciones clínicas evidentes o con sintomas muy leves que generalmente suelen pasar inadvertidos por los pacientes. La manifestación de la enfermedad depende de varios factores entre los que destacan por supuesto la respuesta inmune del huésped, la virulencia del germen y la carga parasitaria. También se ha desmostrado que los niños de las áreas endémicas presentan un mayor riesgo de contraer la enfermedad que los adultos, el principal factor que los hace susceptibles es la mal nutrición. Los síntomas clásicos de este tipo de Leishmaniasis tenemos: Fiebre prolongada, en forma de picos, generalmente nocturna y acompañada de sudoración marcada; hepatoesplenomegalia o aumento del hígado y del bazo, predominando el aumento del tamaño del bazo y linfadenopatía o aumento de tamaño de los nódulos linfáticos que son generalmente de localización generalizada y de consistencia dura, firme, son móviles, no dolorosos; también se observa pérdida de peso, la cual es lenta y progresiva y palidez cutánea-mucosa o anemia, que en algunos casos puede llegar a ser una anemia severa; otro síntoma es la tos seca y los pacientes son más propensos a sufrir infecciones respiratorias por la neumonitis intersticial que produce. Se puede acompañar de sintomas gastrointestinales como por ejemplo: náuseas, vómitos, diarrea y desde el punto de vista los síntomas generales pueden aparecer epistaxis o sangrado por la nariz, anorexia o falta de apetito y debilidad o fátiga. En la piel tiene una apariencia de gris oscura, es lo que dio el nombre en la India de «Fiebre Negra». Esta forma clínica de Leishmaniasis, sin el tratamiento eficaz y oportuno puede dar lugar a complicaciones fatales para el paciente.
Prevención
Las medidas de Prevención van encaminadas fundamentalmente a las personas o al huésped, al hospedero de la enfermedad, van encaminadas al control de los vectores, como agente transmisor, osea la lucha antivectorial y por supuesto al control de los reservorios del parásito Leishmania. En cuanto a las medidas que van encaminadas a los seres humanos para combatir o evitar el contagia de la enfermedad tenemos fundamentalmente:
- Uso de mosquiteros en las casas, a la hora de dormir, el uso de malla o tela metálica o malla fina en las ventanas, en las puertas de las casas, de la residencia, de los centros laborales que puedan existir en estas zonas endémicas o zonas rurales.
- Uso de repelente o insecticidas.
- Uso de ropa protectora, hablamos de mangas largas, pantalones, prendas que cubran la mayor parte del cuerpo, que constituyan método de barrera y que eviten la picadura de insectos.
- Uso de insecticidas intradomiciliario.
- Deshierbar o desmalezar las zonas cercanas a las residencias o centro laborales.
- No existen vacunas ni medicamentos que prevengan la leishmaniasis.
- La limpieza de gallineros y de todo lugar en donde los animales de corral realicen sus necesidades, se evita que el flebótomo se reproduzca y transmita los parásitos causantes de las Leishmaniasis.
- El ordenamiento del entorno; el depósito correcto de la materia orgánica en descomposición (frutas, hojas, etc.) y los escombros
Para finalizar no todas las úlceras son Leishmaniasis, es importante tomar en cuenta la epidemiología, la procedencia, ya sea de una zona endémica o no, la confimación parasitológica y por supuesto la respuesta inmonológica para confirmar el diagnóstico y no apoyarse únicamente en la clínica.